Construir el Centro Deportivo de Wukesong en Pekín suponía mucho más que crear un nuevo campo de entrenamiento para los atletas de los Juegos Olímpicos de invierno de 2022. El estadio, con capacidad para 1900 personas, se construyó como un legado futuro para que los chinos practicaran deportes de invierno. Su fachada cristalina multicolor se ha diseñado para que actúe como filtro de la luz del sol, evoca los patrones de cristal y las grietas del hielo y la nieve en el suelo, y establece una conexión emocional con los residentes de Pekín. Los arquitectos eligieron recubrimientos en polvo Interpon para conseguir los colores exactos que necesitaban para crear esas flores de hielo y proteger el edificio para las futuras generaciones de deportistas de invierno.